Jejum Intermitente

Ayuno intermitente: qué es, beneficios y cómo hacerlo

Ayuno intermitente: ¿qué es, beneficios y cómo hacerlo?

El ayuno intermitente es un estilo de vida en el que se ayuna durante periodos prolongados, que pueden variar entre 16 y 24 horas, y durante los cuales solo se puede beber agua y bebidas no calóricas, como tés o café sin azúcar ni edulcorantes.

El ayuno intermitente ayuda a fortalecer el sistema inmunológico, mejora el estado de ánimo y la agilidad mental, previene el envejecimiento prematuro y aumenta la quema de grasa corporal, favoreciendo la pérdida de peso.

Este estilo de vida solo se aconseja a personas sanas y, por tanto, se recomienda que se realice siempre con la orientación de un médico o nutricionista, para valorar el mejor tipo de ayuno intermitente, según el objetivo y la tolerancia de cada persona.

Beneficios del ayuno intermitente

Los principales beneficios del ayuno intermitente son:

Regular los niveles de colesterol y triglicéridos: esto se debe a que los alimentos ingeridos antes y después del ayuno deben ser bajos en azúcar y grasas, además de ser ricos en fibra, lo que favorece la eliminación del exceso de grasa, mejorando los niveles de colesterol y triglicéridos en sangre;

Aumentar el metabolismo: contrariamente a la creencia de que el ayuno puede ralentizar el metabolismo, esto solo ocurre en casos de ayuno superior a 48 horas. Sin embargo, en el ayuno intermitente controlado, la ingesta baja en calorías reduce los niveles de glucosa e insulina en sangre. Esto obliga al organismo a utilizar las células grasas del cuerpo, que aportan mucha energía y aceleran el metabolismo;

Prevenir la presión arterial alta: El ayuno intermitente disminuye los niveles de grasas malas (LDL) y aumenta los niveles de grasas buenas (HDL), facilitando la circulación sanguínea y previniendo la presión arterial alta;

Prevenir la diabetes: el ayuno intermitente asociado con un bajo consumo de azúcar en la dieta ayuda a equilibrar los niveles de glucosa e insulina en la sangre, previniendo la diabetes;

Ayuda a perder peso: no comer durante al menos 16 horas disminuye los niveles de la hormona insulina en la sangre, además de estimular al organismo a utilizar las reservas de azúcar y las células grasas, lo que contribuye directamente a la pérdida de peso. Comprenda mejor cómo el ayuno intermitente puede ayudarlo a perder peso;

Prevenir la flacidez: el ayuno intermitente promueve el aumento de los niveles de la hormona GH (hormona del crecimiento) en la sangre. Con ello, además de que esta hormona facilita la quema de grasa corporal, también ayuda a aumentar la masa muscular, previniendo la flacidez;

Desintoxicar el organismo: abstenerse de comer al menos 16 horas, beber mucha agua y evitar alimentos grasos y ricos en azúcar, disminuir los niveles de azúcar y grasa en el organismo, lo que ayuda a equilibrar la flora intestinal y desintoxicar el organismo, evitando problemas de salud como asma, artritis, cáncer y esteatosis hepática;

Disminuir el riesgo de enfermedades del corazón: por ser una herramienta que prioriza una dieta rica en fibra, vitaminas y antioxidantes, el ayuno intermitente previene la formación de placas grasas en la sangre, ayudando a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, como el infarto, apoplejía y aterosclerosis;

Prevenir el envejecimiento prematuro: disminuir el consumo de azúcares y grasas, y priorizar alimentos ricos en fibra, minerales y vitaminas, como ocurre en el intervalo del ayuno intermitente, ayuda a desinflamar, favorecer la hidratación y estimular la producción de colágeno, disminuyendo las arrugas y el envejecimiento prematuro.

Durante el ayuno intermitente también es posible sentirse más alerta, tener mejoras en la memoria, presentar más disposición, mejor humor y sensación general de bienestar.